Parece que los militares se han tomado en serio poner orden en el país y ahn decidido cerrar la Playa de Leonardo. El uso y abuso han llegado a su práctica destrucción por lo que se ha optado por prohibir cualquier excursión.
Las autoridades avisan con tiempo. Los turistas no serán bienvenidos en octubre por los funerales del difunto Rey. De todos modos estar allí con TODO cerrado no debe de ser muy divertido.
Ya hemos comentado en alguna ocasión las prebendas con las que cuentan los monjes en este país. Sorprende al visitante que en los supermercados cuenten además con un lineal completo dedicado a ellos. Se apilan los regalos que el ama de casa puede comprar para satisfacer las necesidades de los bonzos.